He seguido a Taza (Naomi Davis) hace años de manera intermitente. Me hacían gracia sus fotos coloridas, sus niños sonrientes y mofletudos y todos sus increíbles paisajes de Nueva York. A ratos la dejé de seguir. Yo quería quedarme embarazada y ella no dejaba de tener bebés. Gemelas la última vez. Todo era demasiado para una infértil que vivía en un barrio residencial madrileño de ladrillo rojo.
Qué gracia, yo también seguí a Taza durante muchos años 😊. En si blog, sus redes…Es curioso a mí también me pasa que esa gente llega a formar parte de mi vida, el hecho de seguirles durante tantos años hace que cuando desaparecen de golpe me despiertan las ganas de reclamar…”hey te has ido sin avisar”…como si tuviera algún derecho a reclamar..
También soy la de los propósitos de septiembre, más que de enero creo yo.. a ver si cumplo alguno..
Gracias por tu newsletter…. Es mi preferida de todas.. me saca una sonrisa nada más verla en mi bandeja de entrada 😊
Quizá me centre en una parte muy pequeña de tu relato pero…¡Lo de tener la suerte de conservar tus diarios de niñez y de adolescencia no me puede parecer mayor verdad! El otro día precisamente pensaba en cómo me hubiese gustado conservar los míos, para ver cómo me las apañaba emocionalmente en aquella época, porque soy Dori y tiendo a olvidar esas cosas, o al menos, a no tener un recuerdo más o menos nítido.
Hace unos meses, vaciando la casa de mis padres y, en concreto, mi habitación, encontré una carta que escribí a los Reyes Magos cuando debía tener 9 o 10 años y en la que me despedía pidiéndoles que me ayudaran ‘con esos nervios que tan locos vuelven a mamá y a papá’. Me quedé realmente absorta, porque no recuerdo una etapa de nervios a esa edad, tanto como para que fueran motivo de aparecer en mi carta a los RRMM. Esos diarios de niñez me hubiesen venido genial para disipar dudas.
Gracias por la recomendación del libro de Bárbara Blasco, no lo conocía. E intentaremos ayudarte en tu propósito de ser rica comprando tu libro 😉
Es de una belleza inmensa tu reflexión: "Y contra todo lo que cabía esperar, muchas de esas obsesiones y repeticiones están ahí. Yo que me creo tan evolucionada y tan lista. Pues, nada, siempre a vueltas con lo mismo". No he podido evitar verme reflejada, en el fondo lo que me mueve no ha cambiado demasiado.
Yo también sigo a Taza, y pensé mucho en que le había pasado, incluso busqué en internet… tanta exposición de su vida y me extrañó que se fuera tan de repente, sin ninguna explicación…aunque supongo que tampoco se le puede reclamar, no?
Yo también confío en poder retirarme con una loteria.
Yo tb seguí a Taza. Me genera mucha curiosidad saber qué fue de ellos. Pensé que me había perdido alguna información.... Pero vro que desaparecieron sin dejar rastro.
.
De propósitos, a mí los veranos me cambian la vida. En verano decidí dejar el banco y estudiar farmacia. En verano decidí separarme. En verano decidí olvidar y empezar de cero. Siempre en verano. En Navidad estoy acurrucada bajo la manta, y eso poco tiempo, y días ajetreados. Pero el verano es lo suficientemente largo como oara meditar y tomar decisiones.
Qué curioso, yo leí hace un tiempo "le luci nelle case degli altri"(en su versión original, en italiano) y recuerdo que no me volvió loca...es cierto que se leía bien, pero creo que me resultó poco verosímil...si lo volviese a leer ahora no sé si opinaría lo mismo (igual nuestras percepciones también son cíclicas🤔). Un saludo
Qué gracia, yo también seguí a Taza durante muchos años 😊. En si blog, sus redes…Es curioso a mí también me pasa que esa gente llega a formar parte de mi vida, el hecho de seguirles durante tantos años hace que cuando desaparecen de golpe me despiertan las ganas de reclamar…”hey te has ido sin avisar”…como si tuviera algún derecho a reclamar..
También soy la de los propósitos de septiembre, más que de enero creo yo.. a ver si cumplo alguno..
Gracias por tu newsletter…. Es mi preferida de todas.. me saca una sonrisa nada más verla en mi bandeja de entrada 😊
Quizá me centre en una parte muy pequeña de tu relato pero…¡Lo de tener la suerte de conservar tus diarios de niñez y de adolescencia no me puede parecer mayor verdad! El otro día precisamente pensaba en cómo me hubiese gustado conservar los míos, para ver cómo me las apañaba emocionalmente en aquella época, porque soy Dori y tiendo a olvidar esas cosas, o al menos, a no tener un recuerdo más o menos nítido.
Hace unos meses, vaciando la casa de mis padres y, en concreto, mi habitación, encontré una carta que escribí a los Reyes Magos cuando debía tener 9 o 10 años y en la que me despedía pidiéndoles que me ayudaran ‘con esos nervios que tan locos vuelven a mamá y a papá’. Me quedé realmente absorta, porque no recuerdo una etapa de nervios a esa edad, tanto como para que fueran motivo de aparecer en mi carta a los RRMM. Esos diarios de niñez me hubiesen venido genial para disipar dudas.
Gracias por la recomendación del libro de Bárbara Blasco, no lo conocía. E intentaremos ayudarte en tu propósito de ser rica comprando tu libro 😉
Es de una belleza inmensa tu reflexión: "Y contra todo lo que cabía esperar, muchas de esas obsesiones y repeticiones están ahí. Yo que me creo tan evolucionada y tan lista. Pues, nada, siempre a vueltas con lo mismo". No he podido evitar verme reflejada, en el fondo lo que me mueve no ha cambiado demasiado.
Yo también sigo a Taza, y pensé mucho en que le había pasado, incluso busqué en internet… tanta exposición de su vida y me extrañó que se fuera tan de repente, sin ninguna explicación…aunque supongo que tampoco se le puede reclamar, no?
Yo también confío en poder retirarme con una loteria.
Yo tb seguí a Taza. Me genera mucha curiosidad saber qué fue de ellos. Pensé que me había perdido alguna información.... Pero vro que desaparecieron sin dejar rastro.
.
De propósitos, a mí los veranos me cambian la vida. En verano decidí dejar el banco y estudiar farmacia. En verano decidí separarme. En verano decidí olvidar y empezar de cero. Siempre en verano. En Navidad estoy acurrucada bajo la manta, y eso poco tiempo, y días ajetreados. Pero el verano es lo suficientemente largo como oara meditar y tomar decisiones.
No se te ocurra envidiar…
Septiembre y Enero (con su cuesta y sus propósitos). Y también Agosto y Diciembre (con turrones y Nocheviejas). Gran post.
Acabo de contribuir a tu sueño de leer y escribir sine die tumbada (o recostada) en una playa. ;)
“Los de septiembre…”
Qué inspirador! ;P
Un abrazo!!
Qué curioso, yo leí hace un tiempo "le luci nelle case degli altri"(en su versión original, en italiano) y recuerdo que no me volvió loca...es cierto que se leía bien, pero creo que me resultó poco verosímil...si lo volviese a leer ahora no sé si opinaría lo mismo (igual nuestras percepciones también son cíclicas🤔). Un saludo