Ahora todo parece fuera de contexto. Comparto la reflexión de las pequeñas metas, el día a día. Poner las luces largas en la vida en este momento constituye un verdadero acto de fe, un desafío.
Mi madre nunca dormía pensando en los problemas de los demás. Me puedo imaginar cómo se sentiría ahora. No encontraría consuelo. A su lado yo siempre parecía una insensible. Mientras ella lloraba, yo solo pensaba en aprovechar el tiempo...por si acaso...Siempre le decía: Mamá, toda esa "aflicción" son los ictus y las enfermedades del mañana y ella me respondía: "Rosa, contigo no se puede hablar. No entiendes nada". Desgraciadamente yo tenía razón...era imposible cargar con tantas penas.
Gracias por dar voz a mis pensamientos, me siento exactamente igual.Llevo días con el corazón encogido y furiosa a momentos. Tanto sufrimiento por culpa de un ególatra. A veces parece que el mundo involucione.
La maldad nos bloquea y nos impide tomar acción, por eso dividir el elefante en pedacito nos ayuda a seguir adelante. Quienes tenéis el don de la escritura podéis ayudarnos a otros que encontramos balsamo en vuestros textos, así que, por favor, sigue escribiendo
Gracias, Amaya. Mi hermano me dijo lo mismo que Nacho, antes de irse a Polonia ayer con su novia ucraniana a recoger a los abuelos de ella, su prima, su madre y su hija de 7 años. Él dándome ánimos a mí. Fue subrealista. Pero me dijo que la única forma que encontraba de sobrellevar el tema y poder ayudar a su novia, era partiendo el problema en trozos pequeños y enfrentándolos uno a uno. Y dijo también que tenemos que intentar seguir con nuestra vida, que los terroristas lo que quieren es romperla, paralizarnos y que así no podamos ayudar. Me hizo reflexionar: he hecho lo poco que puedo hacer para ayudar y estoy intentando disfrutar cada día. No nos queda otra.
La burbuja en la que vivimos nos aleja de la realidad,por eso es tan enriquecedor escuchar ,leer y aprender de las experiencias de los demás.Gracias una semana más Amaya.
El miedo se apodera de mi mente. Me bloqueó. Me gustaría cerrar los ojos y pensar que estaba soñando, que todo es una película en mi mente. Demasiadas cosas ya.
Ahora todo parece fuera de contexto. Comparto la reflexión de las pequeñas metas, el día a día. Poner las luces largas en la vida en este momento constituye un verdadero acto de fe, un desafío.
Gracias por tus palabras, Amaya.
Mi madre nunca dormía pensando en los problemas de los demás. Me puedo imaginar cómo se sentiría ahora. No encontraría consuelo. A su lado yo siempre parecía una insensible. Mientras ella lloraba, yo solo pensaba en aprovechar el tiempo...por si acaso...Siempre le decía: Mamá, toda esa "aflicción" son los ictus y las enfermedades del mañana y ella me respondía: "Rosa, contigo no se puede hablar. No entiendes nada". Desgraciadamente yo tenía razón...era imposible cargar con tantas penas.
¡Yo creo también! Tampoco sé mucho más...
Gracias por dar voz a mis pensamientos, me siento exactamente igual.Llevo días con el corazón encogido y furiosa a momentos. Tanto sufrimiento por culpa de un ególatra. A veces parece que el mundo involucione.
La maldad nos bloquea y nos impide tomar acción, por eso dividir el elefante en pedacito nos ayuda a seguir adelante. Quienes tenéis el don de la escritura podéis ayudarnos a otros que encontramos balsamo en vuestros textos, así que, por favor, sigue escribiendo
Gracias, Amaya. Mi hermano me dijo lo mismo que Nacho, antes de irse a Polonia ayer con su novia ucraniana a recoger a los abuelos de ella, su prima, su madre y su hija de 7 años. Él dándome ánimos a mí. Fue subrealista. Pero me dijo que la única forma que encontraba de sobrellevar el tema y poder ayudar a su novia, era partiendo el problema en trozos pequeños y enfrentándolos uno a uno. Y dijo también que tenemos que intentar seguir con nuestra vida, que los terroristas lo que quieren es romperla, paralizarnos y que así no podamos ayudar. Me hizo reflexionar: he hecho lo poco que puedo hacer para ayudar y estoy intentando disfrutar cada día. No nos queda otra.
Escribir es paz, no lo dejes nunca
La burbuja en la que vivimos nos aleja de la realidad,por eso es tan enriquecedor escuchar ,leer y aprender de las experiencias de los demás.Gracias una semana más Amaya.
El miedo se apodera de mi mente. Me bloqueó. Me gustaría cerrar los ojos y pensar que estaba soñando, que todo es una película en mi mente. Demasiadas cosas ya.